El Síndico advierte de los problemas de los niños de familias desfavorecidas para participar en actividades extraescolares, salidas y colonias

El Síndico de Agravios, Rafael Ribó, advierte de los problemas de los niños de familias desfavorecidas para participar en actividades extraescolares, salidas y colonias. En un informe para alertar que la crisis económica y la reducción de las subvenciones públicas han hecho crecer las desigualdades territoriales y socioeconómicas para acceder al ocio educativo, recoge que estos niños hacen un 30% menos de extraescolares que las de familias con más bienestar, del 83% al 50%. En el marco de este informe se entiende por ocio tanto las actividades de educación en el ocio (esparcimientos, agrupamientos, casales) y otras actividades lúdicas y educativas (actividades extraescolares, deportivas y artísticas) como las salidas y colonias escolares, configuradas como actividades complementarias de carácter voluntario en el ámbito escolar En el informe  han participado algunas de las entidades sociales de ocio que forman parte de la Plataforma de Infancia de Cataluña (PINCAT) que fueron presentes al Parlamento cuando el Síndico le entregó el informe a la Presidenta, Núria de Gispert.

Ribó alerta que, a las desigualdades sociales existentes, se  añade que en los últimos años se han reducido drásticamente los recursos públicos destinados al ocio educativo. Por eso ha pedido a la Generalitat ayudas económicas y una normativa que garanticen que todos los niños puedan participar en todas las actividades de ocio educativo, como salidas y colonias escolares o actividades extraescolares. Uno de los principales problemas del sector, precisamente, es la poca regulación y el hecho que no estén contabilizadas todas las actividades que se hacen.

El Síndico ha entregado a la presidenta del Parlamento, Núria de Gispert, el informe, que atribuye la reducción de actividades, en parte, al hecho que se han reducido las subvenciones de la Generalitat y los ayuntamientos en las escuelas y las AMPAs por actividades extraescolares de casi 3 millones el 2007 a 0 euros desde el 2011, así como las subvenciones de la Secretaría General del Deporte a los clubes, federaciones o consejos deportivos escolares. Las únicas aportaciones que han aumentado son las dirigidas en los centros abiertos del Departamento de Bienestar y Familia, que han pasado de 3,2 a 6,4 millones de euros y de 5.400 plazas a 7.600. Pero estos recursos van a parar a los niños en situación de riesgo, pero no a buena parte de los que tienen dificultades económicas.

Ante todo ello, Ribó pide que se tenga en cuenta la Convención sobre los Derechos del Niño de la ONU y que se valore el ocio educativo como parte imprescindible de la socialización y educación de los niños, tanto por parte de las administraciones como por parte de las familias.